Amanece en Chile Chico

Buenos días!!

Ayer os escribía desde Cochrane, donde tuve que pasar noche, para poder ir al día siguiente a Cala Tortel, un pueblo muy bonito, construido sobre pasárelas  de madera. 

Estuve toda la noche de antes de ayer, dándole vueltas a lo de la frontera, y nada mas levantarme ayer, antes de coger el bus para ver Cala tortel, empecé a moverme para conseguir información de como llegar a Chile Chico, que está a unos 220 km de cochrane, y que es donde se encuentra el paso fronterizo.

El problema de estas zonas tan australes de la Patagonia, es que están demasiado desconectadas del mundo,es decir, no se puede salir tan fácil de ellas, ya que los autobuses no pasan todos los días.

Total, que pregunto por el pueblo a ver cuando sale el autobús para Chile Chico, y me dicen que solo hay bus los lunes,y los sábados, y estamos a martes, imaginaros... 

Lógicamente no puedo esperar al sábado, y el problema, es que el trayecto a Chile Chico, a parte de largo, es muy peligroso para la bici,ya que se circula por una carretera muy estrecha, al lado de un precipicio,y con mucho viento. Una especie de embudo, donde a veces incluso prohíben circular a los coches.

Cojo el bus a Cala Tortel, y voy todo el camino dándole vueltas al tema. Cala Tortel es precioso, disfruto de la visita, saco varias fotos, pero mi cabeza sigue pensando en como llegar a la frontera.

Antes de montarnos en el bus para el viaje de vuelta, me acerco al chofer y le pregunto por cuanto estaría dispuesto a llevarme a Puerto Guadal, un pueblo a 100km de Chile Chico, para pasar la noche ahí, y al dia siguente, completar el recorrido con la bici.

Después de negociar largo rato, dice que me lleva por unos 40 euros,ese mismo día, nada más regresemos de la excursión. Por mi perfecto, es algo caro, pero no me queda otra.

Según llegamos a Cochrane, voy a por mis cosas al hostal, y cuando estoy yendo hacia la plaza, veo a dos chicos con una camioneta, que casualmente, había visto antes en Cala Tortel. 

Me acerco a ellos y les pregunto si habían estado en Cala tortel, me contestan que sí, y comenzamos a charlar. Les pregunto sin mas, a ver hacia donde van, y me dicen que van a Chile Chico!! Pienso... Joder! Que casualidad!. 

Les pregunto a ver si me pueden llevar, que les pago algo, y me dicen que sin problema, que me llevan gratis!! Que les invite luego a unas birras y hecho.

Voy donde el chofer del autobús, y le digo que he encontrado gente que me lleva,y que por tanto no hace falta que me lleve el. Se mosquea conmigo porque resulta que no me iba a llevar el, si no su hermana, y que ha venido desde Puerto Guadal a buscarme, así que me pide que al menos le pague la gasolina. 

Se la pago por no montar bronca (15 euros), y me subo a la camioneta con Felipe y Luciano, que son chilenos, y aprovechando un desplazamiento por trabajo, recorren la patagonia en su camioneta.

En seguida conectamos y nos pasamos las tres horas de viaje,entre risas, anécdotas, y mucho buen rollo, tanto que al llegar a Chile Chico,ya de noche, alquilamos una cabañita entre los tres y nos comemos un buen asado mientras charlamos distendidamente, e intentamos arreglar el mundo.

Son dos tipos excepcionales, de verdad, ojalá hubiera más gente así por el mundo, espero volvermelos a encontrar alguna  vez, en el camino.

Ahora son las 9 de la mañana aquí, y me estoy preparando para salir con la bici rumbo a Perito Moreno, un pueblo que está ya en Argentina, a 70 km de aquí, y que se llama igual que el famoso glaciar de El Calafate.

Veo complicado seguir bajando en bici después, porque las distancias entre pueblos son muy grandes, y no hay nada entre medio, donde poder acudir ni hospedarse. 

Por ese motivo elegí la ruta austral en vez de ésta antes de comenzar el viaje, para evitar quedar desamparado, pero bueno, las cosas se han dado así y hay que aceptarlas.

Cuando llegue a Perito Moreno os escribiré de nuevo para contaros qué tal la etapa.

Aguuuuur!!

                                          Los craks Chilenos!!